miércoles, 13 de marzo de 2013

Perdido en Alta Mar.

Hasta los cojones. Estoy hasta los mismísimos cojones. Y eso que no tengo. Pero estoy hasta los cojones.

Hoy, en mi rutina diaria de ir a entrevistas de trabajo, he acudido a otra más. Ilusionada no, lo siguiente. Cumplía todos los requisitos (o eso creía). Era trabajo de promotora ESTABLE. Para una marca (no se sabía cual) en centros comerciales. Chupado, o eso me pensaba yo.

10,00 de la mañana. Me presento a mi entrevista. Cuando llego hay 2 personas más, y eso ya a mi me huele mal. La entrevistadora no estaba aún. Y empieza a llegar más gente. Hasta un total de 14 personas. Resultado: entrevista grupal (mierda absoluta).

FASE 1: Gente de todas las características, con un perfil de edad de unos 28 para arriba. La mayoría habían trabajado para El Corte Inglés (punto negativo para mí). La mayoría habían trabajado ya para la marca que se trataba (otro punto negativo para mí). Pasamos uno por uno hablando de nuestra experiencia. Pocos teníamos estudios (he contado 3 conmigo).

FASE 2: Flipando estaba. Me ponen un caso práctico. Individual. Véase un caso en el que vas en un yate (ya para empezar yo no me imagino dentro de un yate) y se le pega fuego. Y tienes 15 cosas, las cuales tienes que numerar del 1 al 15 en orden de importancia para ti. En 20 minutos. Me sobraban 15 minutos por lo menos. Le he echado una foto al ejercício (lo siento, soy tuitera).

FASE 3: Lo mismo pero en grupo. Te das cuenta, o que eres subnormal perdida, o que tu opinión es totalmente diferente al resto del mundo. No estaba de acuerdo con la mayoría de lo que decían. Pero vamos, al final te da igual ocho que ochenta, y pones lo que dice el consenso. Después de expresar mi opinión, que molaba mucho.

FASE 4: Partiendo de la base que la fase 2 y la 3 no estaban los entrevistadores, ni siquiera se habían leído nuestro ejercício, y que hemos perdido una hora más de nuestra vida, aparecen. Para volver a preguntar lo mismo. Experiencia en el sector. Todos son muy chachis. Y preguntan para que quieren el trabajo. A mi ni me lo han preguntado, así que ya sabía que no me iban a seleccionar. Pero voy a darle énfasis a las preguntas del entrevistador conmigo:

- ¿Eres enfermera? (sorpresa) ¿Y tienes un máster? (Mucha más sorpresa aún) [A lo mejor se ha sorprendido porque soy rubia, porque otra cosa...] ¿Y por qué no te vas a Alemania a trabajar? (¿Y por qué no me cago yo en tu puta madre?).

FASE 5: Se van a deliberar, estilo Gran Hermano el día de las nominaciones, y vuelven a los 2 minutos para decir los que pasan a una entrevista final. Y, ¡QUÉ SORPRESA! YO NO ESTABA AHÍ. Nos echan a los 3 que tenemos estudios (¿casualidad?). Yo ya lo tenía claro, después de sus preguntas, y que ni siquiera me ha preguntado para qué quería el trabajo (Por cierto, pregunta muy absurda la de ¿Para qué quieres el trabajo? "Nada hombre, para rascarme la nariz en un centro comercial en vez de hacerlo en casa").

Total, que tener estudios en tiempos de crisis es una mierda. Una grandísima mierda. Que si tienes estudios solo quieren que te vayas a tomar por culo fuera de España. Y punto. Así que:

Niños, no estudiéis, que es malo para conseguir trabajo.

Y como soy buena, os dejo la foto del ejercício de la entrevista, por si vais a alguna y os ponen esta mierda que ni se leen.


No hay comentarios:

Publicar un comentario